Siegfried Schtauffen es, junto a su alter ego malvado Nightmare, uno de los personajes más populares e importantes de la saga de lucha tridimensional con armas Soul Calibur. Siegfried es un joven alemán, embutido en kilogramos de placas de acero y cargado con una enorme espada a dos manos. Es de rostro angelical, de cabello rubio y ojos cerúleos. Su gran sentido de la justicia contrasta con las masacres provocadas por su alter ego, lo que le convierte en un alma atormentada que vaga por el mundo a la cerca de eliminar su maldición.

Hubo un tiempo en que los siervos se rebelaron contra los nobles, y de entre esos ejércitos de siervos surgieron héroes. Uno de ellos fue Frederick, nombrado caballero del pueblo y héroe de la gente. Frederick tuvo un romance con una granjera alemana y de tal romance, nació un bebé al que puso de nombre Siegfried, en honor al protagonista de la poesía épica El Anillo de los Nibelungos.

Al poco tiempo Frederick volvió a la guerra, prometiéndole a su esposa que volvería, así que Siegfried se quedó sólo con su madre. Sin la tutela paterna, Siegfried creció sin control y pronto empezó a mostrar su lado más oscuro. Ya de muy joven formó una banda de bandidos, que asaltaban y asesinaban a caballeros que volvían de las cruzadas para robarles sus posesiones. Así hacían fortuna, hasta que una noche atacaron a un grupo de caballeros huídos mientras dormían. Arrasaron su campamento, y el propio Siegfried cortó la cabeza de su comandante. Al reflejarse ésta contra la luz de la luna y aún goteando sangre, descubrió con horror que era la cabeza de su propio padre. Huyó a la profundidad de los bosques, y durante mucho tiempo estuvo diciéndose a sí mismo que él no había sido quien había asesinado a su padre. Poco a poco fue cayendo en un pozo de locura y, tras oir rumores sobre una poderosa espada llamada Soul Edge, marchó en su búsqueda. Sospechó que la poseía el noble Sir Stefan, atacó su castillo en Ostrheinsburg pero allí no encontró nada. Al final, dió con el paradero de Soul Edge en Valencia, en manos del pirata Cervantes. Consiguió la espada y ésta, cobrando vida propia, hizo un trato con él: devolvería la vida a su padre si Siegfried le daba las suficientes almas como para recuperar su poder. Así, Siegfried inició una terrible oleada de asesinatos y muerte, y conforme Soul Edge recuperaba su fuerza, se hizo con el control de la mente y el cuerpo de su portador. Durante tres años una oleada de muerte asoló Europa, El Caballero Azul, Nightmare, sembraba el terror y la muerte allá por donde pasaba. Numerosos héroes trataron de dar caza a Nightmare, siendo todos pasto del filo de Soul Edge. Hasta que un día, cuando Nightmare estaba a punto de iniciar el ritual que recuperaría a SoulEdge, dos héroes llegados desde oriente se enfrentaron a Nightmare. Xianghua y Kilik portaban tres armas sagradas de su templo, Kali-Yuga, Dvapara-Yuga y Krita-Yuga, que al estar frente a Soul Edge revelaron su verdadera esencia. Juntas formaron Soul Calibur, el arma que representaba el polo positivo de Soul Edge. Así, Kilik y Xianghua vencieron y Soul Edge fue debilitada de nuevo. Siegfried huyó y con Soul Edge debilitada, había recuperado de nuevo su conciencia. Sin embargo no estaba libre de su influencia, cada vez que despertaba, su espada Requiem aparecía bañada en sangre. Decidió alejarse de la sociedad para evitar así seguir haciendo daño, y aprender a convivir y superar todo el mal que había causado.

Siegfried trató de permanecer despierto siempre, pero al final sucumbia al sueño, y entonces Nightmare aparecía. Con el paso del tiempo SoulEdge se iba haciendo más y más fuerte, hasta que volvió a tomar el control por completo de nuevo. Nightmare recorrió el mundo a la caza de almas y a la búsqueda de fragmentos de SoulEdge para reparar la espada y así conseguir recuperarla. En un momento dado, se enfrentó a Raphael, y, cuando éste estaba a punto de ser derrotado, Siegfried consiguió detener a Nightmare desde lo más profundo de su mente. En éste momento de distracción, Raphael atacó a la espada, atravesándola completamente. Soul Edge se debilito, y Siegfried utilizó ésta oportunidad para liberarse. También observó algo, una luz había sido liberada junto a él y, cuando se dió cuenta de que era Soul Calibur, que había quedado atrapada en Soul Edge, la utilizó contra la terrible espada, atravesando su ojo. Soul Edge no había sido destruida, se dio cuenta de ello pronto. Sin embargo, mientras estaban clavadas, había quedado anulada, latente, así como también Soul Calibur. Ahora Siegfried era libre al fin del control de la espada, y marchó llevándose Soul Calbir y dispuesto a asumir sus pecados.

Alguien en otro lugar, sin embargo, tenía otros planes. Zasalamel consiguió resucitar a Nightmare como una entidad propia, ajena a Siegfried. Y éste de nuevo empezó a sembrar el mal. Siegfried se sintió responsable y decidió que debía ser él quién le detuviera. Así, ambos chocaron en la Catedral Perdida, Nightmare contra Siegfried, Soul Edge contra Soul Calibur. En medio del combate, las espadas chocaron y una explosión terrible acabó con todo. Siegfried sobrevivió a duras penas y, por fin, descubrió que Soul Edge había sido destruída, así como Soul Calibur.

Al fin libre de su maldición, Siegfried volvió a su hogar, reformó su banda de bandidos en una banda de mercenarios que lucharían por la justicia y proteger el bien y así hicieron durante años. Hasta que un día, pasadas dos décadas, Siegfried observó que Soul Calibur se reactivó. Sin duda, Soul Edge también había despertado de nuevo...